Muere el perro que veló la tumba de su dueño durante más de 10 años
La historia de Capitán es única. Pero coincide con la de los demás perros en su lealtad, amor puro y sensibilidad. ¡Los perros son maravillosos!
Capitán, el entrañable perro que velo a su dueño durante 10 años
¿Conocías la historia de Capitán? Miguel fue un hombre que con ilusión y cariño regaló a Capitán a su hijo, todo esto en el año 2005. Lamentablemente, Miguel falleció un año después, dejando un vacío en la casa que su mejor amigo supo leer y sentir.
Tras el entierro, la familia pudo ver que Capitán no estaba en casa, así que comenzaron a preguntarse donde estaría. Al estar varios días sin mirarlo, pensaron que no volverían a encontrarlo, porque quizás alguien lo atropelló o porque fue adoptado por otras personas.
Pero, cuando volvieron al cementerio a presentarle respetos y recuerdos a Miguel, ¡Capitán estaba tumbado en la tumba de Miguel!
Los trabajadores del cementerio así como el director del mismo se extrañaron de ver al perro merodeando por el cementerio, sin rumbo, hasta que encontró una tumba y se quedó al lado de ella.
Desde muchos lugares del mundo, llegaron para retratar la historia de Capitán, que emociona y mucho a cada persona que la conoce.
Aunque después volvía a casa cuando el resto de familiares iban a visitar a Miguel y luego regresaban, Capitán siempre volvía puntual a estar con su amado dueño.
Cada día, Capitán acudió junto a su compañero, hasta que su vida se apagó en los últimos días por una larga enfermedad. Argentina ahora llora la muerte de Capitán, uno de los perros más queridos por el amor que expresó hacia sus dueños, un amor puro de ser a ser sin final, que ahora podrán volver a revivir, ambos en otro lugar.
¿A qué es una hermosa historia?
No es la primera vez que se dan casos de perros que acompañan a sus dueños después muerte, ya que ellos se niegan a abandonarlos, percibiendo su olor y presencia, aunque ya no estén. La sensibilidad de los perros se hace notar en cada acto, siendo un ejemplo de vida, honestidad, lealtad, serenidad y sobre todo buenos valores. ¡Comparte porque es sin duda una de las historias más bellas de la semana!
