Di adiós a la fobia de los perros a los fuegos artificiales
La Navidad y el fin de Año aportan el momento de festejar con sus fuegos artificiales y con ello, presentándose el terrible miedo de los perros a estos incómodos ruidos.
Trucos para terminar con la fobia de los perros a los fuegos artificiales
¿Cómo hacer para que no lo pasen tan mal y para que nosotros no nos agobiemos al verlos asustados?
Hay muchas personas que han dado con trucos que dicen funcionarles: como entretenerlos con “chuches” de perros para que piensen en la comida y no en el ruido o la luz, dejarlos en casa para que no corran y los pueda pillar un vehículo, poner música en casa para disimular los cohetes… pero lo que uno aplica al otro puede irle fatal.
Ante la fobia de los perros a los fuegos artificiales , lo primero que hará tu perro es esconderse, sobre todo si ha asociado a ese ruido un suceso desagradable o un estímulo exagerado.
Es fácil entenderlos: si alguna vez durante su vida, tú has chillado (aunque fuera de emoción) por los fuegos artificiales, él o ella lo habrá asociado a algo malo, que asusta, así que siempre entrará en pánico. Si te ha visto sobreexcitado/a, también lo asociará con el nerviosismo, así que es muy bueno que no te muestres con emociones exageradas cuando se presenten los cohetes.
Si lo has probado y no funciona. Y si tu perro es todavía cachorro, siempre puedes entrenarlo para que no adquiera ansiedad. Es muy sencillo. Que alguien de la familia se haga cargo de él o ella y que juntos hagan algo relajante, un masaje en la cabeza y en el entrecejo del animal con un aceite para perros de lavanda, favorece que estén más tranquilos, aunque también podéis jugar a alcanzar un premio de comida, un rico snack en algún juguete inteligente, estará ¡tan pendiente de encontrar la golosina que se olvidará de lo demás!
Recuerda que no todos los perros tienen el mismo comportamiento y reacción ante la fobia de los perros a los fuegos artificiales, y que por lo tanto para lo que unos funciona para otros no… así que ¡tenlo en cuenta! Sobre todo ármate de paciencia y actitud positiva. Los perros merecen aprender con amor y comprensión. Si no lo entiende ahora ¡seguro lo hará más tarde!
