¿El agua de mar es peligrosa para los perros?
Ahora que es normal ir de vacaciones a la playa con nuestros perros, seguro te preguntarás qué le podrá hacer mal en el viaje. Mucho cuidado ya que una excesiva ingesta de agua de mar podría no ser recomendable para nuestros perros.
Debemos procurar que nuestros perros no beban agua del mar
Hoy me gustaría centrarme en uno de los elementos más comunes, cuando hablamos de las vacaciones: ¡el agua del mar! Ahora que incluso han abierto muchas playas para perros, en donde está permitido estar con ellos, seguro te preocupará saber si tendrá algún efecto secundario en la salud de ellos.
Siempre es recomendable que eduques a tu perro para que no coma y beba fuera de casa; tanto de fuentes como del mar, haciendo así más fácil que no enferme. Un perro que haya comprendido lo que puede y no hacer, te será más sencillo de controlar, a la hora de que no esté haciendo cosas raras o que no debería.
El agua del mar sí es tóxica para los perros. Piensa que ellos pueden beberla de manera accidental, jugando con otros perros en la orilla o intencionadamente, cuando beben por tener sed. Es muy importante, por ello, que siempre lleves una botellita de agua para que no se sientan obligados a beber de las aguas del mar o las fuentes sucias, evitando las diarreas y vómitos en los perros.
Playa para perros si, pero vigilando que no beban agua salada
El agua salada crea así, molestias gastrointestinales en los perros que se acentúa con deshidrataciones, provocando severas intoxicaciones en perros. Cuando ellos ingieren además arena, es más probable que sucedan los vómitos así como movimientos estomacales severos e incluso anorexia con una notable pérdida de apetito.
En algunos casos, también se dieron muertes de animales por ingestión de agua salada, cuando el can, por cualquier juego bebe mucha agua directamente. Si tu perro no sabe nadar, también te expondrás a que salga corriendo al ver a otro perro, pudiendo entrar en el agua y como las personas, tener más riesgo de ahogarse, tragando más líquidos.
Ante cualquier signo anormal en tu mascota como temblores, vómitos que no cesan, sed excesiva, comportamiento nervioso e irritable, debilidad o pérdida de consciencia, acude al veterinario, que te recomendará qué hacer en estos casos. ¡Si sigues sus indicaciones no pasará nada! ¡Toma nota!
