Los perros y la inapetencia en verano
A muchos perros llega a afectarles la calor del verano ¿lo sabías? Llegando incluso a alimentarse menos. Hoy te aportaré trucos para que todo esto cambie.
El calor puede llegar a resultar agobiante, sobre todo para perros que no están acostumbrados a pasarla. Las intensas oleadas de viento templado, las horas más peligrosas de sol así como el tener un pelaje abundante dificultan la tarea de pasarlo bien en las épocas más conflictivas, es por ello que siempre debemos crear la mejor de las comodidades para nuestras pequeñas mascotas.
Intenta no pasearlos en las horas de más intenso sol como el mediodía (de 12.00 a 16.00) o por la tarde en los días más duros, dejando los paseos más largos para las horas que se encuentran entre las 08.00 y las 10.00 de la mañana o por las noches, durante las 21.00 y las 22.30 horas. A estas horas tu perro incluso correrá más y no se agobiará, por lo que le será más placentero visitar todo tipo de zonas para socializar con otros cachorros y perros y para hacer sus necesidades. Si no tienes más remedio que llevarlo en las horas de más sol, intenta llevarlo por lugares con sombra, así como siempre portar contigo una botellita de agua especial para ellos con bebedero incluido que podrás encontrar en bazares o en tiendas de animales especializadas. También si notas que el perro está muy fatigado, será aconsejable que lo dejes descansar en un lugar con sombra.
Hay muchas maneras de hacer que tu perro no pierda las ganas de comer en verano, dale agua siempre que la necesite y de esta manera siempre estará hidratado. Si lo descuidas y no le proporcionas agua, habrá peligro de que siempre se deshidrate, que presente esos síntomas de inapetencia y que no se encuentre bien.
Debes saber que debido a las condiciones de luz y el tiempo del verano, los perros tienden a disminuir sus ganas de comer debido a que en estado primitivo tenían que cazar para sobrevivir. Así, ahora el perro regula su apetito de manera natural, debido a este aviso de sus ancestros, ahorrando así energía y también esfuerzo, generando mayor estabilidad en su organismo.