¿Cómo saber si un perro está envejeciendo?

Hay señales que hablan acerca de cómo puede estar envejeciendo un perro, así que hoy te voy a comentar todo acerca de ello para que entiendas el proceso.

¿Cómo saber si un perro está envejeciendo?

Es muy fácil. Al igual que ocurre con las personas siempre hay varios signos que hablan del envejecimiento, algunos son más visibles y otros necesitarás de orientación para poder contemplarlos, pero al final lograrás darte cuenta de ello.


Lo primero que debes hacer es no sentir ansiedad ante la idea de que tu mascota esté ganando en edad, ya que es un proceso natural que deben pasar. Además de moderar este sentimiento también será muy bueno que trabajes con la aceptación. Una vez tengas tu mente clara en esos aspectos, todo saldrá de manera mucho más sencilla.

Hay varias señales que te indicarán que todo marcha según el avance del tiempo. Una de las primeras es que en aquellas razas de perros que tengan el manto de tonos arena, negro o marrón tendrán mechones de pelo gris. Normalmente suelen salir alrededor de los bigotes y en la cara, así que no deberás asustarte, si en tu mascota de más de 8 años aparecen.

También notarás en perros de más de esta edad diferentes signos de envejecimiento, que el animal no recorrerá tan deprisa ciertos recorridos, que se cansará antes, incluso que no subirá a sus sitios preferidos, como el sofá. Esto ocurre porque muchos perros en su edad madura, tienen dolores de articulaciones o problemas de visión y no se atreven a hacer estos saltos solos.

Las cataratas, son por lo tanto, otra de las señales de envejecimiento más claras una vez se han pasado de los 7 años. Se notan cuando los perros tienen una capita blanquecina clara en los ojos, que con el paso de los años se va opacando. Obviamente, en los primeros años, tu mejor amigo, mirará como si tuviera una tela transparente debajo, que provocará sombras y menor nitidez. Pero a medida que sean más graves, la visión sí se dificultará.

También notarás como el perro que está en edad madura, sentirá más ganas de dormir, siendo habitual que esté más cansado en sus horas anteriores de juego. No te preocupes por ello, mientras no muestre decaimiento, signos de poca vitalidad o veas algún síntoma que antes no ha aparecido no habrá ningún riesgo.


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