¿Por qué mi perro me quiere montar?
Muchas personas viven con la pregunta de: ¿ Por qué mi perro me quiere montar ? Así que hoy hablamos de ello en detalle, ¡para que sepas el motivo de por qué se produce! 😉
El instinto de «montar» en los perros, motivos
Uno de los principales motivos de porque un perro puede intentar montarte es porque tiene energías atrapadas y sin gastar, haciendo que necesite un escape hacia esa falta de ejercicio que no ha podido realizar. Por eso siempre es de vital importancia que lo lleves a pasear varias veces al día. Al menos de 3 a 5 veces será necesario, todo dependiendo de que tamaño sea el perro y de su edad, ya que tanto los cachorros como los perros más ancianos necesitan salir más veces. Así evitarás comportamientos no deseados en tus perros.
Además de un exceso de energía, el efecto de montar, también puede haber sido resultante de un deseo de dominación. Muchos perros que montan a sus dueños es únicamente para demostrarles que son los que tienen las de ganar, siendo los jefes de casa. Cuando esto suceda siempre tendrás que realizar una corrección en el comportamiento de los perros para que no vuelvan a repetir lo mismo. Piensa que tú debes ser la persona dominante, y no aceptar que ellos lleven las de ganar. Si ellos también saben adecuarse a ti y saber que tienen a un líder superior, estarán mejor educados y sabrán qué hacer para comportarse bien.
Ahora, ¡debes mantenerte atento, ya que ser el líder indicará imponer un respeto y corregirlo a tiempo con premios positivos no aplicar violencias o malos tratos! ¡Eso nunca es deseable en el entrenamiento para perros!
Otras veces, la monta en los perros, también se aplica para los momentos de celo, así que no debes de preocuparte y sí corregir hasta que el animal aprenda que es lo que debe hacer.
En el caso de los machos, que no tienen época diferenciada para su celo, tendrás que darte cuenta de que a veces, podrán hacerlo como un modo de jugar o de llamar la atención. Intenta siempre enseñarles que no deben hacer eso para lograr que les hagas caso e ignora para no excitarlos emocionalmente. ¡Sabrán que eso no surgirá efecto y no lo repetirán! 😉