El primer año de vida del perro
Durante el primer año de vida, el cachorro se desarrolla física y psicológicamente. La educación y cuidados que reciba el perro en su primer año determinarán al perro adulto en el que se convertirá.
Cuando los perritos acaban de nacer, es necesario tener en cuenta ciertos factores para poder proporcionarle.s los cuidados adecuados.
Capacidades de los cachorros al nacer
Al nacer, el sistema nervioso del cachorro aún está desarrollándose. Pero a pesar de esto, el cachorro cuenta con una serie de reflejos primarios, que le permiten sobrevivir en el día a día.
El reflejo de escarbar permite al cachorro buscar las zonas de la madre con mayor temperatura, donde se acurruca; el reflejo de mamar hace que el cachorro busque la teta inmediatamente; el reflejo perineal activa la eliminación de la orina y las heces (la madre lo estimula lamiendo enérgicamente el vientre y la zona bajo la cola); y el reflejo de transporte, que hace que se relaje en cuanto la madre lo coge por el cuello.
Estancia adecuada para los cachorros
Los perros nacen con el canal auditivo y los ojos cerrados. Los ojos comienzan a abrirlos a partir de la segunda semana de vida, y, aunque al quinto día de vida comienzan a abrirse los canales auditivos, es a partir de las tres semanas cuando pueden oír sin problema. Por lo tanto, los cachorros recién nacidos exploran el mundo a través de su olfato, por lo que deberán estar en un entorno despejado.
Además, al nacer, los perros no tienen desarrollados los mecanismos corporales que regulan la temperatura, por lo que suelen pasar frío, aunque no se les vea tiritar, ya que este acto reflejo no se manifiesta hasta las tres semanas de edad.
Los perros, cuando nacen, tienen una temperatura corporal que oscila entre los 35 y 37 grados Celsius la primera semana, a partir de la tercera semana ahí comienza a subir hasta alcanzar los 38.5 – 39.5 grados de un perro adulto. Es por esto por lo que es muy importante que el lugar donde vayan a estar los cachorros mantenga una temperatura no inferior a 30 grados y con una humedad ambiental entre 55 y 65% para evitar la hipotermia y la deshidratación.
La alimentación de los cachorros
En la mayoría de los casos los cachorros son alimentados por la madre hasta el momento del destete, a las dos semanas de vida. Primero hemos de asegurarnos de alimentar a la madre gestante adecuadamente, o informarnos de si ha sido bien alimentada, para evitar problemas de desnutrición en la madre y en los cachorros lactantes.
En el caso de tener cachorros huérfanos o estar en un momento de emergencia en los que los cachorros no pueden mamar de la madre o ésta no disponga de suficiente leche, se puede utilizar esta receta:
- 800 ml de leche líquida para cachorros adquirida en el veterinario (o de leche líquida común sin lactosa si no tenemos acceso a la del veterinario).
- 2 yemas de huevo.
- 200 gr de crema de leche.
- 2 cucharadas de miel.
Esta mezcla debe hacerse en frío y mantenerse en la nevera, sacando sólo lo necesario para cada toma. Se calienta al baño María y se proporciona en biberón. La cantidad total que se debe dar al cachorro en el día corresponde aproximadamente al 10% de su peso, repartiéndola de la siguiente manera:
- Pequeñas tomas cada 2 ó 3 horas durante los cinco primeros días de vida.
- Durante la segunda semana se reducirán las tomas, llegando a 6 tomas al día cada 4 horas.
- A partir de las dos semanas se pasará a 4 raciones cada 6 horas.
A los 20 días de vida, aproximadamente, ya se le puede dar comida. La aparición de los primeros dientes de leche es una buena referencia para empezar a combinar la dieta láctea con alimento sólido. El veterinario es quien mejor nos puede asesorar acerca de qué comida es la correcta para los cachorros y cómo introducirla en su dieta.
Hay que tener en cuenta que los cachorros no defecan por sí mismos sin estimulación hasta los 20 ó 25 días de vida. Su madre los estimula lamiendo sus esfínteres, así pues, si los cachorros no están con su madre debemos ayudarles a evacuar mediante un masaje con algodón húmedo.
A las seis semanas, el perrito ya debería poder comer pienso de cachorro seco sin ningún problema.
Los dientes de leche
Como muchos mamíferos, los perros nacen sin dientes, pero 28 dientes de leche van apareciendo en sus bocas de forma gradual, para después ser sustituidos por la dentadura definitiva, compuesta por 42 piezas.
A las dos semanas de vida comienzan a aparecer esos primeros dientes de leche y a los dos meses la dentición decidua está totalmente completa. Rondando el tercer mes de vida, la raíz de los dientes se empieza a reabsorber y los dientes de leche caen por sí solos. A menudo no solemos encontrar los dientes de leche de nuestro cachorro, pues suelen tragárselos o perderlos en cualquier lugar.
El cambio dental suele prolongarse hasta los seis meses de edad y entorno a los 7-8 meses el desarrollo bucal del cachorro ha finalizado, pudiendo observarse las 42 piezas dentales.
En cuanto a la cronología dental canina:
- Los caninos aparecen en el día 20 de vida.
- Los incisivos aparecen en torno al día 25.
- Los premolares terceros y cuartos aparecen entre la tercera y la cuarta semana de vida.
- Los incisivos centrales y los segundos premolares salen entre la cuarta y la sexta semana.
- Los primeros premolares aparecen sobre los cuatro meses de edad. Los primeros premolares nacen directamente como dientes permanentes.
Desarrollo emocional del cachorro
El periodo de sociabilización del cachorro con sus congéneres se encuentra en pleno apogeo a los 15 días de vida, sobre todo en el caso de las camadas de varios cachorros. Como sus sentidos están terminando de desarrollarse, el cachorro puede empezar a familiarizarse con otras especies y con su entorno.
En este periodo de sociabilización, que se alarga asta el tercer mes, e incluso a veces se prolonga hasta el cuarto mes de vida, la madre continua desempeñando un papel esencial: mediante juegos, enseña a sus cachorros a morder de forma controlada, así como los distintos rituales de sumisión y pacificación. En poco tiempo madre y cachorros pueden comunicarse y éstos aprenden gran variedad de cosas.
Es entonces cuando nosotros nos encontramos en el momento ideal para proporcionarles otros estímulos que vuelvan su entorno más interesante: pueden introducirse sonidos, juguetes y también acercarles a nuevos seres humanos. La exposición del cachorro a nuevos estímulos y situaciones debe realizarse gradualmente, para evitar temores y miedos.
El cachorro va a recordar las situaciones a las que ha sido expuesto durante la fase de adaptación ambiental, familiarizándose con ellas. Si la socialización con otras especies (socialización interespecífica) no resulta satisfactoria, puede dar lugar a que el perro muestre una actitud temerosa y agresiva ante ciertas situciones.
Hay que tener en cuenta también que los cachorros son muy curiosos y todo se lo llevan a la boca, por lo que habrá que estar pendientes de que no coma nada que pueda ser perjudicial para ellos, ya sea por ser tóxico o porque pueda tragárselo. Lo ideal es comprarles juguetes adaptados a ellos, para que tampoco nos destrocen la casa, cosa que no pueden evitar en el momento en el que les empiezan a salir los dientes.
El baño es otra forma de estímulo para ellos, el cual podemos asociar al juego para evitar futuros traumas. Se puede asear al perro desde que nace, pero no conviene hacerlo antes de la segunda semana para evitar que su madre lo rechace. En el caso de tener que sanear al cachorro a una edad muy temprana, al terminar ha de ser frotado contra la madre o la manta en la que suela estar, para que recupere el olor y no sea rechazado. En el caso de ser un cachorro huérfano no existen problemas de rechazo.
El paseo y las vacunas
Al cachorro no se le debe sacar a pasear antes de suministrarle las primeras vacunas, ya que tienen tendencia a contagiarse de enfermedades al tener las defensas muy bajas.
El calostro (primera leche ingerida por el cachorro en su vida) es rico en anticuerpos de la madre, por lo que protege a la cría frente a virus y bacterias presentes en el ambiente, por eso es esencial que el cachorro lo ingiera al nacer. Pero según va creciendo el cachorro, o si éste es huérfano, esta protección va disminuyendo o es ausente.
Si quieres pasear con tu pequeño antes de que le hayan suministrado las primeras vacunas, lo ideal es que no pase mucho tiempo en el suelo y, sobre todo, que no esté cerca de zonas donde hayan hecho sus deposiciones otros perros.
El calendario de vacunación estipula que entre la sexta y la octava semana de vida del cachorro debe suministrarse la primera vacuna.
El calendario de vacunación puede variar dependiendo del estado del cachorro, el veterinario y el país donde se encuentre el cachorro.
Emancipación de los cachorros
A partir de los dos meses de vida la madre comienza a mostrarse cada vez más distante hacia sus cachorros, les amamanta menos y les muestra indiferencia. Aún así, la madre continúa enseñándoles y ejerciendo disciplina sobre ellos.
A partir de esta edad, los cachorros pueden ser adoptados por otras familias, aunque cuanto mayor tiempo pasen con la madre menos problemas de conducta aparecerán. En el caso de adopciones tempranas o cachorros huérfanos, la educación de los cachorros necesitará de más tiempo y atención.
Consejos básicos para el cuidado de cachorros
- Es importante preparar el espacio que van a ocupar los cachorros, ha de ser un lugar con la temperatura y humedad ambiental adecuada.
- Revisa a todos los cachorros al nacer para detectar posibles problemas de salud o malformaciones.
- Pesa frecuentemente a los cachorros para comprobar que aumentan de peso con el paso de los días.
- Mantén al cachorro con su madre y hermanos al menos hasta las siete semanas de vida para que pueda aprender las pautas de comportamiento adecuadas.
- Sociabiliza al cachorro adecuadamente con personas y otros animales.
- Acude al veterinario siempre que tengas alguna duda y sigue sus consejos sobre alimentación y vacunación.
El cuidado de perros requiere tiempo, sobre todo cuando son cachorros, por lo que antes de adoptar uno evalúa si vas a poder dedicarle la atención suficiente. Con cariño y cuidado el cachorro se convertirá en un fiel compañero de vida que te brindará muchos momentos felices.
Hay que tener todas las vacunas al día